PUBLICIDAD PIRATA.

Volvió un clásico, reciclado.

Si señoras y señores, hay que ponerse de pie porque volvió un clásico, la publicidad de Jamón Picorell. El de la pecadora que confiesa haberse comido 2 kilos y medio de jamón Picorell ella solita, y recibe la respuesta, cómplice y fenomenal, del cura “¿no la probo en la torta de jamón y queso?”, espectacular.

Esta pieza causó gran revuelo ya que el cura elegido en el casting era un cura de verdad, de una Capilla, en Capilla del Sauce, un pueblito del interior de Florida que tiene una capilla con un sauce al costado. Pero el asunto es que la publicidad salió al aire un viernes santo, el día que esta prohibido, para la religión católica, comer carne vacuna, ovina, o porcina, como el jamón Picorell, esto causó un gran malestar en la iglesia católica uruguaya llegando incluso al Vaticano que inmediatamente despidió al cura actor.

Una pieza que, sin dudas, ha llegado para formar el triángulo de las publicidades más viejas junto a la de “Casa América”, la de los dibujitos y el jingle pegadizo con un sonido excelente... para la época aquella, 1970, más o menos. Y también junto a la de “Azul FM” , la de los dos cisnes que se dan un pico y forman un corazón, que tierno... los dos bichos ya deben de haber reencarnado como 50 veces.

Viendo esta tendencia es posible hacer una lista con las próximas publicidades que se van a reciclar:

- Mortimer Cuadriculata. La esponja para lavar los platos Mortimer, “la cuadriculata, la cuadiculata dura mucho más”.
- Galletitas Suspiros. La canción “Only you” adaptada al contexto de las galletitas.
- Plastipastel Snarpie: el de la gurisa rubia que no le queria prestar las “crayolas” al locutor nabo que le preguntaba “¿me los prestas?”.
- Colrorinca: EL mamarracho de Inca, una cascola con forma de lapiz que pegaba y pintaba, “Colorinca pega y pinta”.
- Arvejas Altama. “Altama mami, se llamana Altama”, sin palabras.

Y bueno, la lista puede ser interminable, hay miles dando vuelta y lo peor de todo es que no se pueden olvidar, pero lo peor de todo es que alguien te los haga recordar.